El Museo de la Ciudad presenta desde el pasado viernes la muestra Hilvanes y Pespuntes, de Ornella Ridone.
Esta es una búsqueda de la artista por explorar en el bordado en lugar del pincel, un lenguaje en el que, a decir de la propia Ornella, se siente acompañada por miles de mujeres que en todos los tiempos y latitudes han empleado la misma técnica para expresar su creatividad y su sentido estético.
A lo largo de dos salas, observamos la importancia del color y la forma en las piezas de Ornella Ridone. No se conforma con enmarcar su trabajo y dejarlo a la buena del curioso, sino que de vez en cuando traspasa el espacio tradicional, trasgrediendo y de alguna forma agrediendo sutilmente al observador, para que busque aún más adentro de la obra y se encuentre en los detalles.
Ahí en lo abstracto de la muestra se percibe una cierta y cromática tendencia, por momentos no se permite ver más allá de la primera impresión que causan las piezas mostradas, por lo que fuera del estilo o técnica utilizada, no se percibe un discurso claro en conjunto. “En la intimidad propiciada por la acción de bordar, me nace hablar de mí, de mi historia personal, de mis descubrimientos, reflexiones y deseos más profundos”, dice Ridone y en esa textura habrá de buscar el espectador.
La recién inaugurada exposición Hilvanes y Pespuntes, de Ornella Ridone, permanecerá a la vista del público hasta el 29 de enero del 2006, en la planta baja del Museo de la Ciudad, ubicado en Guerrero No. 27 Norte, Centro Histórico de Querétaro.